«Vosotros Conservadores, Liberales, Radicales, Demócratas y demás restos de los antiguos partidos políticos, sois los grandes y únicos autores de la destrucción nacional...
Vosotros habéis hecho de la política arte noble por excelencia, el más inmundo de los comercios...»

—Jorge González von Marées

«Hay, en efecto, cosas que no se pueden expresar con palabras. Se manifiestan por sí solas. Son lo místico».

—Ludwig Wittgenstein

«Durante siglos de silenciosa confrontación, encuentro y trabajo se creó un nuevo mundo en las vastedades del continente americano. Surgió una sociedad, una cultura, una conciencia que ya no era ni podía ser la de los españoles que habían venido a la aventura de la conquista, ni la de los indios aislados y prisioneros de sus hieráticos y sangrientos despotismos, ni la de los negros encadenados y humillados habían dejado en las selvas de África. Un mundo que iba a mezclar y a combinar sus contrarias herencias para crear expresiones y actitudes nuevas. Que iba a hacer suya la lengua de los castellanos, la religión de Roma, el legado cultural del Mediterráneo, la naturaleza de cordilleras, amazonias, llanuras y costas nuevas, el sentido telúrico del indio y la sensibilidad mágica del negro. El gran ser físico y cultural nacido del mestizaje, un nuevo ser, hijo y hacedor de ese Nuevo Mundo...»

—Arturo Uslar Pietri

«El coraje se encuentra en lugares inesperados».

—J. R. R. Tolkien

«La democracia moderna ya no puede concebirse con la antigua división tripartita aristotélica: monarquía, aristocracia y democracia. La única oposición exclusiva a la democracia es cualquier tipo de estado privilegiado».

—Carl Schmitt

«Es un gran logro espiritual no conformarse a este mundo. Las ideas y suposiciones de las democracias consumistas modernas impregnan casi todos los aspectos de nuestra cultura. Se convierten en una parte ineludible de nuestro paisaje interior. Solo examinando tales suposiciones a la luz de la tradición cristiana más amplia podemos esperar permanecer fieles a Cristo en la verdad. Quienes insisten en la ausencia de autoridad espiritual o exigen que nada sea gracia mediadora descubrirán que sus vidas sirven al amo más cruel de todos: el espíritu de la época».

—Pe. Stephen Freeman

«Así como Italia descubrió América, América y el resto del Nuevo Mundo deben descubrir a Italia, no sólo en las grandes ciudades, vibrantes de vida y bulliciosas de industria, sino también en el campo, donde los humildes trabajadores esperan con silenciosa resignación que aparezca en el horizonte el amanecer de una paz victoriosa y justa».

—Benito Mussolini

«Escucho a los políticos con sus pequeñas fórmulas, a todos los políticos, y me vuelven loco. No saben de qué país están hablando, están tan lejos como la luna».

—Pier Paolo Pasolini

«La función de las revoluciones es destruir las ilusiones que las crearon».

—Nicolás Gómez Dávila

«La vida de un hombre no son los años miserables que se arrastran desde la cuna hasta la tumba, sino unos pocos destellos raros de brillantez. Aquellos que debemos a la guerra, al amor, a la aventura, al éxtasis místico o a la creación».

—Dominique Venner

«La Segunda Guerra Mundial, a pesar de lo que se afirma desde diversos bandos, no fue en absoluto una oposición entre «democracias» y totalitarismo. La oposición se dio, más bien, entre dos formas de totalitarismo, una de las cuales —la soviética— contaba con el apoyo de las democracias burguesas».

—Alain de Benoist

«La esencia de un músico difícilmente se puede expresar con palabras. Lo mismo ocurre con sus objetivos. Camina hacia ellos como un sonámbulo: no sabe hacia dónde va, pero camina hacia una luz lejana, ya sea una estrella eternamente brillante o un seductor fuego fatuo».

—Gustav Mahler

«La familia está entre los valores a defender tanto contra el comunismo como contra la concepción liberal-atomista del individuo. Sin embargo, para promoverlo y protegerlo del proceso de disolución ya en marcha, es necesario "desburguesarlo" e integrarlo con los conceptos de pueblo y tradición, tanto los de sangre como los del espíritu. Sólo entonces, una vez que la familia haya dejado de ser una mera realidad naturalista y conformista, podrá restablecerse orgánicamente su orden dentro del Estado, confirmando así la jerarquía de valores amenazada mortalmente por concepciones democráticas y liberales egoístas».

—Julius Evola

«A partir de 1789, los Bancos, y con ellos las Bolsas, desarrollaron un poder que era exclusivamente suyo, basado en las necesidades de crédito que sentía la Industria, debido a su inmenso crecimiento. Como en todas las civilizaciones, cuando se trata de dinero, afirman ser la única fuerza. Comienza de nuevo la vieja lucha entre la economía productiva y la economía conquistadora, convirtiéndose en la batalla desesperada que libra el pensamiento técnico por su libertad frente al pensamiento financiero. Este gigantesco conflicto entre un número muy reducido de hombres de raza y acero, dotados de una enorme inteligencia -un conflicto que el simple ciudadano de la metrópoli apenas percibe y menos aún comprende- debe ser contemplado desde lejos, bajo el prisma de la Historia Universal. Veremos entonces que la mera lucha entre los intereses de los empresarios y los trabajadores quedará reducida a la insignificancia y a la trivialidad».

—Oswald Spengler

«Cuando mirábamos hacia el norte, desde allí brillaba sobre nosotros Friedrich, la Estrella Polar, alrededor de la cual Alemania, Europa e incluso el mundo parecían girar».

—Johann W. Goethe

«Los latinoamericanos no son el patio trasero de nadie».

—Wang Yi

«La carne se extiende cada vez más, como una gangrena sobre la superficie del globo. No puede imponerse límites, sigue prosperando a pesar de sus desaires, toma sus derrotas por conquistas, nunca ha aprendido nada».

—Emil Cioran

«Perdí mi centro luchando contra el mundo. Apoyé el fascismo porque buscaba un Estado ético; Había esperado que fuera una tercera vía entre el capitalismo usurero y el materialismo ateo-comunista. La encarnación del sueño que quería construir sobre el mundo».

—Ezra Pound

«Nuestra adoración moderna a ideales vanos es absurda. ¿Qué importa la condición de la plebe? Solo necesitamos mantenerla lo más discreta posible. Lo que es más importante es perpetuar aquellas cosas bellas que tienen verdadero valor porque implican impresiones sensoriales reales en lugar de teorías insulsas. La "igualdad" es una broma, pero una gran abadía o catedral, cubierta de musgo, es una realidad conmovedora. Si nos corresponde salvaguardar y preservar las condiciones que producen grandes abadías, palacios, pintorescas ciudades amuralladas, vívidos horizontes de campanarios y cúpulas, lujosos tapices, fascinantes libros, pinturas y estatuas, órganos colosales, música noble y hazañas dramáticas en campos de batalla —esto es todo lo que hay en la vida—: si los eliminamos, no tenemos nada por lo que un hombre de buen gusto o espíritu quiera vivir. Si los eliminamos, nuestros poetas no tienen nada que cantar; nuestros soñadores no tienen nada con qué soñar. La sangre de un millón de hombres está bien derramada para producir una leyenda gloriosa que emociona a la posteridad y no importa en absoluto por qué se derramó».

—H.P. Lovecraft, Carta a James F. Morton, 10 de febrero de 1923

«Ciertamente soy menos inclinado a lo maravilloso que muchos ateos, pero no puedo dejar de pensar que las historias de milagros, predicciones, encantamientos, etc., no son más que relatos distorsionados de efectos extraordinarios producidos por ciertas fuerzas latentes o, como se dijo una vez, por poderes ocultos.

Nuestra ciencia sigue siendo tan brutal y tan llena de mala fe; Nuestros médicos muestran tanta impertinencia porque saben tan poco, niegan tan descaradamente los hechos que les perturban, para proteger las opiniones que explotan, que desconfío de esos espíritus fuertes tanto como desconfío de los supersticiosos. Sí, estoy convencido de que nuestro racionalismo crudo es la inauguración de un período que, gracias a la ciencia, llegará a ser verdaderamente prodigioso; El universo, en mi opinión, es un laboratorio de magia, de donde podemos esperar cualquier cosa...»

—Pierre-Joseph Proudhon

📜 Prólogo a la edición italiana de «Cesarismo Democrático»

Estimados lectores, en esta oportunidad les brindamos el prólogo de la edición italiana del «Cesarismo Democrático» de Laureano Vallenilla Lanz, traducido por primera vez al castellano por nuestro colaborador Daniel García Ayaach.

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«Que no permita que se erijan estatuas a los ociosos, enemigos del bienestar social y que, en detrimento de las costumbres y de la vida humana, inspiran palabras y sueños, sino que a los que construyen templos a los dioses, se les aumente el culto y el celo por aquellas leyes y religiones que encienden la grandeza del alma y el ardiente deseo de gloria que acompaña al servicio a la patria y a la utilidad del género humano, de donde surgen universidades para el cultivo de las costumbres, de las letras y de las armas. Y tenga cuidado de no prometer el honor y la recompensa de la vida eterna y de la inmortalidad a quienes son aprobados como pedantes y mentirosos, sino más bien a quienes, empleándose en el mejoramiento de su propio intelecto y del de los demás, en el servicio de la comunidad [...] demuestren ser agradables a los dioses. Salve, Júpiter».

—Giordano Bruno, Expulsión de la bestia triunfante

«Los viejos mapas, constituciones y libros de leyes han desaparecido, y a la mirada atónita de quienes despiertan lentamente, la imagen de este mundo cambiado aparece como un poderoso bosque cuyo suelo, después de una noche de relámpagos y tormentas, está cubierto con una maraña de árboles arrancados y ramas destrozadas».

—Ernst Jünger

«Para cortar barbas y acortar vestiduras, Pedro el Grande necesitaba toda la fuerza de su invencible personalidad; pero para conducir innumerables legiones al campo de batalla, él, como cualquier otro gobernante, sólo necesitaba decir la palabra».

—Joseph de Maistre

Harukichi Shimoi en la serie "M - Il figlio del secolo"

«El Estado construido sobre la base del sufragio popular y la igualdad, cimentado sobre el miedo, no es sólo una construcción innoble sino también precaria».

—Gabriele D'Annunzio, Le vergini delle rocce

«La esencia de lo “moderno” reside en el impacto de lo imprevisto y en los problemas que ello conlleva: problemas de prejuicios y de asimilación».

—Yukio Mishima

«No es de extrañar que en una época dominada por la economía, lo primero que llame la atención sean los exteriores bonitos, ya que es lo que más falta».

—Carl Schmitt

«"Ya está. ¡Dios y el diablo! Cuando era niño, mi madre quería convertirme en sacerdote. Cuando crecí, me hice agrónomo entrenado para... estrangular a la gente y romperles el cráneo. ¡La revolución es una cosa muy estúpida!"
Y con rabia y asco, escupió y empezó a fumar su pipa».

—Ferdinand Ossendowski, Bestias, hombres, dioses

«Nunca se ha desarrollado en la Tierra una sociedad tan mecánica. Ella ya no tiene ninguna relación con Dios, ninguna relación entre hombre y hombre, sólo una relación entre hombre y objeto».

—Eduard Limónov

Cruz bifurcada en la iglesia de Santa María del Capitolio, Colonia.

«Esta idea de una Iglesia nacional apareció por primera vez en los países protestantes; o, para ser más exactos, fue quizá sobre todo para hacer realidad esta idea que se instigó el protestantismo, pues parece claro que Lutero no fue nada más, al menos políticamente, que un instrumento de las ambiciones de ciertos príncipes alemanes».

—René Guénon

«Hay almas incurables y perdidas para el resto de la sociedad. Si se les priva de un medio de locura, inventarán mil otros. Crearán métodos más sutiles y descabellados, métodos absolutamente desesperados. La naturaleza misma es fundamentalmente antisocial; solo mediante la usurpación de poderes la sociedad organizada se opone a la inclinación natural de la humanidad».

—Antonin Artaud

«Tenemos las manos libres. Comencemos sin demora a limpiar, a sanear, a renovar, a ampliar Italia, liberándola del peso del pasado y del extranjero».

—F. T. Marinetti, Democracia futurista

«(...) La honestidad con uno mismo es un hábito de autoconocimiento que debe practicarse diariamente».

—Louis Lavelle, El error de Narciso

«Otium Et Bellum

Era un ocio de un tipo muy específico.
La aristocracia romana, como dice Nietzsche, tenía como lema otium et bellum, ocio y guerra, siendo éstas las únicas formas correctas de vida para un hombre de poder y libertad».

—BAP, Bronze Age Mindset

«La Constitución niega nuestra existencia».

—Yukio Mishima

«Es en las ciudades cosmopolitas donde nacen hombres sin tiempo, ahistóricos, hombres de razones y de causas, no de destino, internamente ajenos a la sangre y a la existencia».

—Oswald Spengler, La decadencia de occidente

«El Estado profundo se basa en una tesis cínica, inspirada en Rebelión en la Granja de Orwell: "Algunos demócratas son más democráticos que otros". Pero los ciudadanos comunes podrían interpretar esto como dictadura y totalitarismo. Y tendrían razón. La única diferencia es que el totalitarismo unipartidista opera abiertamente, mientras que el poder en la sombra, que se alza sobre el sistema multipartidista, se ve obligado a ocultar su propia existencia».

—Alexander Dugin

«El progreso de un artista es un continuo autosacrificio, una continua extinción de la personalidad».

—T. S. Eliot

«El colectivo solo puede tener derecho a elección y aprobación si se cree que el "pueblo" puede considerarse una inteligencia única, un gran ser que vive una vida unificada, consciente y racional. Pero esto es un puro mito optimista, sin respaldo en ninguna evidencia social o histórica positiva, inventado únicamente por una raza de sirvientes que, intolerantes a los verdaderos líderes, buscan una máscara para su presunción anárquica de poder arreglárselas por sí mismos en una vida pequeñoburguesa».

—Julius Evola

«Si hay un demonio en la historia humana, ese demonio es el principio de mando. Solo él, sostenido por la ignorancia y la estupidez de las masas, sin las cuales no podría existir, es la fuente de todas las catástrofes, todos los crímenes y todas las infamias de la historia».

—Mijaíl Bakunin

«Todo el secreto de las campañas desatadas contra España se puede explicar en dos palabras: Masonería y comunismo... tenemos que extirpar estos dos males de nuestra tierra».

—Francisco Franco

«El liberalismo no tiene nada en común con la libertad. La gente muere de liberalismo».

—Arthur Moeller van den Bruck

«Reinventemos a los dioses, todos los mitos de los tiempos.
Celebremos los símbolos de los profundos bosques ancestrales».

—Jim Morrison

«Lo que yo solía respetar no era realmente la aristocracia, sino un conjunto de cualidades personales que la aristocracia desarrollaba mejor que cualquier otro sistema... un conjunto de cualidades, sin embargo, cuyo mérito residía únicamente en una psicología de desinterés no calculador y no competitivo, veracidad, coraje y generosidad fomentadas por la buena crianza, el mínimo estrés económico y una posición asumida, Y TAN ALCANZABLE A TRAVÉS DEL SOCIALISMO COMO A TRAVÉS DE LA ARISTOCRACIA».

—H.P. Lovecraft

«Él es el viento, el huracán y la Blitzkrieg, como se llamó la guerra de Hitler. Es la Guerra de Wotan, del Furor Berserker, de la Horda Furiosa de Odín que regresará al fin de los tiempos, el Batallón Definitivo, como hemos dicho. La Guerra Alquímica, también de Mercurio, "el Alado", el Vímana».

—Miguel Serrano

«Me regocijo en este futuro de colores brillantes. Para el soldado, la guerra es el estado normal de las cosas [...] Si caigo, es la muerte más honorable y hermosa».

—Paul von Hindenburg

«Es bueno que la guerra sea tan terrible, o nos encariñaríamos demasiado con ella».

—Robert E. Lee

«La luz estelar babilónica trajo
Una oscuridad fabulosa e informe;
El olor a sangre cuando Cristo fue asesinado
Hizo vana toda tolerancia platónica
Y vana toda disciplina dórica».

—William Butler Yeats

«Quizá se asusten de nosotros las gentes pacatas y encogidas, no nos importa, seremos bárbaros si es preciso, pero realizaremos nuestro destino en esta hora».

—Ramiro Ledesma Ramos

«El comunismo sin poetas, judío, científico, materialista, marxista, no es más que una impostura judía sátrapa, completamente atroz, incomestible, inhumana, un repugnante invernadero forzado de esclavos, un remedio peor que la enfermedad».

—Louis-Ferdinand Céline

«Todos los sistemas modernos están plagados de contradicciones».

—William S. Burroughs

«Es difícil llegar a ser santo. Difícil, pero no imposible. El camino a la perfección es largo, tan largo como la vida. En el camino, el consuelo se convierte en descanso; pero en cuanto recuperes las fuerzas, debes levantarte con diligencia y reanudar el viaje».

—San Padre Pío de Pietrelcina

«El problema es que la impiedad moderna socava toda autoridad, lo que socava las instituciones y deja solo a los individuos. Si estos resultan indignos de confianza, parece que no queda nada. Por eso, muchos católicos hoy se aferran a eclesiásticos indignos y los siguen en su liberalismo, porque la única alternativa parece ser abandonar la Iglesia por completo.

Por el contrario, como sugería la carta de julio, cuando los católicos tienen una fe sólida como en la Edad Media, su fe en la Iglesia como institución permanece inquebrantable ante la mala conducta de los eclesiásticos, porque la institución es mucho mayor que los individuos. Por eso, un católico hoy puede criticar severamente a los papas recientes sin necesidad de ser sedevacantista, y debería poder decir que estos papas han sido muy perjudiciales para el catolicismo sin necesidad de ser acusado de perder la fe o de intentar destruir la Iglesia».

—Obispo Richard Williamson

«Cuando veas el mar descender sobre las arenas, volviendo a las oscuras profundidades del mar abierto, piensa que unas horas más tarde volverá a espumear: blanca, brillante bajo el sol, audaz y fuerte, ¡como si esas olas fueran las primeras en venir a asaltar el mundo!».

—Léon Degrelle

«La guerra nos reveló el sentido de la vida, que no es en absoluto pacifista».

—Saint-Loup

«La insatisfacción de un hombre espiritual es más peligrosa que la de un hombre hambriento».

—Ernst Jünger

«La serenidad es una de las armas más poderosas de que dispone el hombre; Lo usa como una armadura mágica con la que es capaz de enfrentarse a los terrores de la aniquilación».

—Ernst Jünger

«Gobernar con tus ideas como guía es correcto, pero sólo en el caso de que esa idea lleve a resultado correctos, no como ocurrió con Vladímir Ilich (Lenin). Al final esa idea llevó a la ruina de la Unión Soviética».

—Vladimir Putin

«En la antigua Atenas, quien votaba por la guerra iba a la guerra. Quien proponía la guerra era elegido comandante, y luego el comandante luchaba junto a los guerreros.
¿Y ahora qué?
Hoy en día, los líderes rara vez arriesgan sus vidas».

—Pierre Drieu la Rochelle

«Mil años de guerras consolidaron Occidente; Un siglo de "psicología" lo ha reducido a la desesperación».

—Emil Cioran, Silogismos de la amargura

«El bolchevismo fue una revolución falsa e incluso traicionada. El bolchevismo se propuso destruir el capital, pero en lugar de ello atacó la propiedad. Está aliado “en profundidad” con el liberalismo, se diferencia en la superficie de la economía, pero la perversión profunda es común».

—Ezra Pound

«Los dictadores nacen en hogares donde nadie se atreve a dar órdenes a la criada. Criados lejos de sus padres, quienes combatieron, estos hijos de la guerra se liberan de las cadenas de la anarquía en las que las manos de las mujeres los han puesto».

—Henry de Montherlant, Las Olimpicas

«El mito es la apertura secreta a través de la cual las energías inagotables del cosmos se vierten en la manifestación cultural humana».

—Mircea Eliade

«Beatriz muere y Dante siente esta muerte como si fuera su propia muerte —en ese momento experimenta la terrible prueba de la «muerte iniciática»: Dante muere con Beatriz a su vida anterior y luego renace, con ella, a una «nueva vida»— por eso escribe «Vita Nuova», una obra efectivamente inspirada en la muerte de Beatriz y que presenta un indiscutible carácter iniciático».

—António Carlos Carvalho

«Para ser aristócrata, no hace falta provenir de una familia aristocrática, eso es una reliquia. Se necesita tener superioridad interior, estar obsesionado con una idea, y no con los instintos y hábitos de un filisteo».

—Eduard Limónov

«El liberalismo italiano, considerado el único depositario de principios auténticos e inmortales, guarda sin duda una notable similitud con nuestro socialismo, ya casi extinto, ya que el primero, al igual que el segundo, cree poseer «científicamente» una verdad indiscutible, válida para todos los tiempos, lugares y situaciones. Esto es absurdo. El liberalismo no es la última palabra; no representa la fórmula definitiva en el arte de gobernar. En este arte delicado y difícil, que trabaja con los materiales más refractarios y móviles, puesto que trabaja con los vivos y no con los muertos, en este arte no existe la unidad aristotélica de tiempo, lugar y acción».

—Benito Mussolini

«El imperio supremo es el del Emperador que renuncia a toda vida normal, a la de los demás hombres, y en quien el cuidado de la supremacía no pesa como un monton de joyas».

—Fernando Pessoa

«Nietzsche predijo que los europeos se transformarían en lo que son hoy: "esclavos exquisitos"».

—Guillaume Faye

«Nuestro objetivo es la grandeza. La alcanzamos mediante la acción. Pero el pensamiento precede a la acción. Antes de la embriaguez de la acción, ante los fríos cálculos de la inteligencia, del orden de la voluntad y la imaginación. Buscamos los medios para alcanzar la grandeza».

—George Valois

«Parece ser que el destino de la democracia es el de suspenderse a sí misma en la toma de decisiones. Para el demócrata radical la democracia tiene como tal un valor propio, sin que considere el contenido político que se haga con ayuda de ella».

—Carl Schmitt, Sobre el parlamentarismo

«No me gusta este mundo. Definitivamente no me gusta. La sociedad en la que vivo me repugna; la publicidad me da asco; las computadoras me dan náuseas».

—Michel Houellebecq

«El amor por la distancia y el orden, la capacidad de subordinar el elemento individualista y pasional a los principios, la capacidad de actuar y trabajar por encima de la mera personalidad, un sentimiento de dignidad carente de vanidad son características del verdadero espíritu guerrero tan esenciales como las que se refieren al combate real».

—Julius Evola, Metafísica de la guerra

«La poesía está encadenada. Encadena a la raza humana. Las naciones se destruyen o prosperan en la misma medida en que su poesía, pintura y música se destruyen o prosperan».

—William Blake

«Los pueblos del México antiguo unieron al hombre con la gloria del universo: el sol fue el fruto de una locura sacrificial».

—Georges Bataille

«Estoy realmente alarmado por la histeria en este país. ¡Bien podría ser el preludio de una dictadura popular! Medio Oxford está en una especie de frenesí vociferante... Los dioses, decían, primero enloquecen a quienes quieren destruir».

—J. R. R. Tolkien

«Los grandes imperios de la antigüedad no se construyeron únicamente por la fuerza de las armas, sino por la fuerza del espíritu y la fe en una misión superior».

—Jörg Lanz von Liebenfels

«Radicalidad significa intentar siempre comprender más, volver a las raíces. No significa sólo negarse a hacer concesiones, sino interesarse por causas distantes. La búsqueda de los primeros principios y la meditación sobre las cosas últimas son parte de la radicalidad».

—Alain de Benoist

«Nuestras corporaciones son apenas embrionarias. Las entidades patronales, industriales, mercantiles y agrarias, están comenzando a crecer. Los sindicatos de trabajadores, que a veces han tenido una fuerza expansiva por el estímulo del poder, son en su mayoría organizaciones de tipo gremial, no industriales.
El obrero de las fábricas constituye un porcentaje pequeño dentro del proletariado urbano y rural. Somos todavía artesanos y labradores. Estamos más próximos al idilio medioeval de los oficios que al industrialismo contemporáneo, con sus peculiares problemas económicos y sociales».

—Gilberto Alzate Avendaño

«El hombre antiguo que imaginaba la tierra como una isla rodeada por el océano primordial y el cielo como una cúpula protectora colocada sobre ella, o el hombre medieval que imaginaba los cielos como círculos concéntricos que se extendían desde el centro de la tierra hasta la esfera del espíritu divino, abarcando todas las cosas y sin conocer ya límites propios, estos hombres estaban ciertamente equivocados acerca de las verdaderas relaciones que reinaban en el universo físico. Por otra parte, eran perfectamente conscientes de un hecho mucho más importante, a saber, que el mundo material no representa toda la realidad, que está rodeado y penetrado por una realidad a la vez más vasta y más sutil, que a su vez está contenida en la mente; directa o indirectamente, también sabían que la inmensidad del universo no es nada comparada con el Infinito».

—Titus Burckhardt

«El izquierdista es antagónico al concepto de competencia porque, en el fondo, se siente un perdedor».

—Theodore Kaczynski

«Contra las bayonetas y los cañones de las fuerzas extraeuropeas oponemos una voluntad más dura que su acero, que les arrebatará sus armas y su poder de las manos. Con desprecio, reduciremos al enemigo interior a la miseria».

—Francis Parker Yockey

«...si concedemos que la pasión humana tiene el poder de elevarse por encima de todo absurdo, ¿cómo se puede argumentar que no tiene el poder de elevarse por encima de los absurdos de la pasión misma?».

—Yukio Mishima, Confesiones de una máscara

«Yo no veo en el catolicismo, como en ninguna otra religión, sino su grande, imprescindible e insustituible utilidad social; el aporte que pueda dar —dentro de los estrictos límites de sus funciones sociales— a la obra de reconstrucción nacional, sin exponer su prestigio a los embates de las luchas políticas».

—Laureano Vallenilla Lanz, Notas sobre religión

«Con pocas excepciones, la democracia no ha traído un buen gobierno a los nuevos países en desarrollo... Lo que los asiáticos valoran puede no ser necesariamente lo que valoran los estadounidenses o los europeos. Los occidentales valoran las libertades individuales. Como asiático de ascendencia china, mis valores son un gobierno honesto, eficaz y eficiente».

—Lee Kuan Yew

«Amamos el patriotismo belicoso e indomable que los distingue; amamos el orgullo nacional que guía su raza muscularmente valiente; amamos el individualismo potente que no les impide abrir los brazos a los individualistas de todos los países, ya sean libertarios o anarquistas».

—F. T. Marinetti

«Al fin y al cabo, — ¿qué llama ‘Progreso’ el moderno? Lo que le parece cómodo al tonto».

—Nicolás Gómez Dávila

«Los fieles de Shiva o Dioniso buscan el contacto con aquellas fuerzas que... conducen al rechazo de la política, las ambiciones y las limitaciones de la vida social ordinaria. Esto no implica simplemente reconocer la armonía mundial, sino también participar activamente en una experiencia que trasciende y trastorna el orden de la vida material».

—Alain Daniélou

«El Anciano de Días tiene tres cabezas. Se revela en tres arquetipos, los tres formando uno solo. Por lo tanto, está simbolizado por el número tres. Se revelan el uno en el otro. [Éstos son:] primero, la 'Sabiduría' secreta y oculta; encima de éste, el Santo Anciano; y por encima de Él, el Incognoscible. Nadie sabe lo que contiene; Él está por encima de toda concepción».

—Zohar (iii. 288b)

«Un poder solo puede ser derrocado por otro poder, no por un principio, y no queda otro poder que pueda enfrentarse al dinero que este. El dinero sólo es derrocado y abolido por la sangre».

—Oswald Spengler

«A las masas, como a las mujeres, hay que ofrecerles fiestas, guerras, pasiones, botines, torbellinos, indecibles embriagueces».

—Ernesto Giménez Caballero

«Escribía silencios, noches, anotaba lo inexplicable. Precisaba los vértigos».

—Arthur Rimbaud

«No sé qué sea más funesto: si la actitud de no querer ver la miseria, como lo hace la mayoría de los favorecidos por la suerte o encumbrados por propio esfuerzo, o la de aquéllos no menos arrogantes y a menudo faltos de tacto, pero dispuestos siempre a dignarse aparentar que comprenden la miseria del pueblo. Esa gente hace siempre más daño del que puede concebir su comprensión desharraigada de instinto humano; de ahí que ellas mismas se sorprenden ante el resultado nulo de su acción de "sentido social" y hasta sufran la decepción de un airado rechazo, que acaban de considerar como una prueba de la ingratitud de pueblo».

—A. H. | Mi Lucha.

«Para subsistir, pues, el poder temporal necesita una consagración que proviene de la autoridad espiritual; es esta consagración la que le confiere legitimidad, es decir, conformidad con el orden mismo de las cosas. Tal era la razón de ser de la «iniciación real» […] y es en esto que consiste propiamente el «derecho divino» de los reyes, lo que la tradición oriental llama el «mandato del Cielo» […] Toda acción que no proceda del conocimiento carece de principio y, por lo tanto, no es más que una vana agitación; asimismo, todo poder temporal que no reconoce su subordinación a la autoridad espiritual es vano e ilusorio: separado de su principio, solo puede ejercerse de forma desordenada y encaminarse inexorablemente hacia su propia ruina».

—René Guénon, Autoridad espiritual y poder temporal

«Debes amar tu tierra natal como alguna vez amaste el jardín y las flores de tu infancia, porque el guerrero de nuestra orden no desprecia la naturaleza y sus leyes, sino que la ve como una alegoría de algo sobrenatural».

—Miguel Serrano

«Hoy en día, para la mayoría de la gente la libertad sexual es en realidad sólo una convención, una obligación, un deber social, una ansiedad social, una característica necesaria del estilo de vida consumista».

—Pier Paolo Pasolini

«El objetivo del político es amasar una fortuna; el nuestro, construir una patria floreciente y fuerte. Por ella trabajaremos y construiremos. Por ella haremos de cada rumano un héroe, dispuesto a luchar, dispuesto a sacrificarse, dispuesto a morir».

—Corneliu Zelea Codreanu

«Ese siempre es el problema con la historia. Siempre
parece que termina. Pero nunca en verdad lo hace».

—Mencius Moldbug